Magdalena Zegarra
University of Michigan
Antropología, investigadora posdoctoral trAndeS
Magdalena Zegarra Chiappori es una antropóloga médica peruana. Luego de sus estudios de bachillerato en Literatura Hispánica en la PUCP, realizó una maestría en Estudios Teológicos en la Universidad de Harvard. Sus estudios de doctorado en Antropología los cursó en la Universidad de Michigan, Ann Arbor. Magdalena ha publicado diversos artículos académicos, además de op-eds y posts en conocidos blogs antropológicos como Somatosphere o American Ethnologist Website. Sus investigaciones giran en torno al tema del cuidado, la vejez, la precariedad, y la ciudadanía.
El artículo se enfoca en cómo se vive y se construye la intimidad en una dilapidada institución de cuidado de larga estadía en la ciudad de Lima, Perú. Se entiende "intimidad" en esta institución tanto como un conjunto de prácticas que demarcan fronteras, como comportamientos que definen espacios comunes entre las personas y un sentido de pertinencia. Se sostiene que esta institución de cuidado - a la que se llamará "La Merced"- es una geografía social que facilita conexiones interpersonales de gran valor y, al mismo tiempo, refuerza la exclusión social de muchos, como por ejemplo, residentes que padecen de trastornos psiquiátricos. La intimidad en "La Merced" está constituida por dos movimientos diferentes: relacionarse con otros para soportar los embates de una vida de institucionalización y, al mismo tiempo, desconectarse de los demás para alcanzar la misma meta.
El artículo presentará una primera parte introductoria donde se harán las precisiones de cómo envejecen las personas en "La Merced", se mencionará la tesis del artículo y se plantearán las principales preguntas a responder, además de desarrollar un marco teórico para definir "intimidad". La segunda parte explora las maneras en que algunos residentes de esta institución construyen vínculos afectivos sólidos. En la tercera parte el análisis está puesto en cómo se construyen las nociones de clase en este centro. Se hace un escrutinio de cómo aquellos que hoy habitan esta institución y en el pasado tuvieron ciertos privilegios sufren marginación por parte de residentes que, desde siempre, han ocupado posiciones socioeconómicas de desventaja. Una última parte de este acápite hace hincapié en cómo algunos adultos mayores clasifican a los residentes con problemas psiquiátricos como marginales porque sus condiciones de vida les hacen caer en cuenta de que su propio deterioro es inminente.