1.2 El coeficiente de Gini
Se han elaborado varios indicadores para medir la desigualdad de ingresos; sin embargo, el coeficiente de Gini es la medida más conocida y utilizada en las estadísticas nacionales y las comparaciones internacionales. Este coeficiente se expresa como un número entre 0 y 1, en el que 0 significa equidad absoluta (todas las personas en el país obtienen ingresos idénticos) y 1 significa inequidad absoluta (una persona concentra todos los ingresos del país y los demás no tienen ingresos). Puede también expresarse como índice, en cuyo caso el coeficiente es multiplicado por 100. El coeficiente de Gini se calcula como la diferencia promedio de los ingresos entre todos los posibles pares de individuos u hogares de la población.
El coeficiente de Gini fue creado en base a la curva de Lorenz, que muestra gráficamente la distribución de ingresos acumulado respecto a la población (ordenada). De dicha curva se puede leer cuánto porcentaje del ingreso total es acumulado por un porcentaje determinado de la población. La curva de Lorenz es acompañada por una línea equidistante que representa la distribución de equidad perfecta. En este sentido, el coeficiente de Gini mide el área de la diferencia entre la curva de Lorenz y la curva de una distribución ideal justa.
Mapa mundial de Coeficiente de Gini por países. Datos del Banco Mundial, 1992-2018.
Crédito: DennisWikipediaWiki, CC-BY-SA 4.0, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=92529096. Adaptación: Frauke Berg.
Se considera que un país es muy desigual cuando su coeficiente de Gini es superior a 0,40. Este índice permite comparaciones entre países. Los países más igualitarios del mundo – como Dinamarca, Noruega o Suecia – mantienen un coeficiente de Gini histórico que oscila entre 0,21 y 0,27. En contraste, los países más desiguales del mundo – como Brasil, Colombia, Botsuana o Sudáfrica – alcanzan desigualdades en el rango de 0,51 a 0,65. En el transcurso de tiempo, la aplicación del coeficiente de Gini se ha expandido para calcular otras formas de desigualdad, como la patrimonial referente a la concentración de tierras o la concentración de riqueza. Mientras que los ingresos hacen referencia a flujos de dinero percibidos regularmente por trabajo, rendimiento de inversiones (por ejemplo, interés bancario o alquiler de un inmueble) y transferencias (del gobierno o de familiares); la riqueza se refiere al valor de las inversiones en activos físicos y financieros (bonos o propiedades), que a su vez generar ingresos por rendimiento. Si bien la tendencia mundial muestra ingresos crecientes para las clases medias y bajas, éstos no son principalmente dirigidos al consumo y no son suficientes para ahorrar o invertir, es decir, no les permite acumular riqueza. Los estudios sobre la concentración de riqueza para países en desarrollo son escasos debido a la poca disponibilidad de datos sobre activos físicos y financieros en la población. Los pocos estudios existentes para países latinoamericanos indican que la desigualdad de riqueza entre hogares es mayor que la desigualdad de ingresos.
El coeficiente de Gini recibió una serie de críticas, entre ellas:
- El hecho de que el coeficiente de Gini se calcule normalmente sólo a nivel nacional significa que poco se puede decir sobre las diferencias en la distribución de los ingresos dentro de un país.
- El coeficiente de Gini tiende a subestimar cambios en los extremos de la distribución de ingresos (transferencias de ingresos de un hogar rico aun hogar pobre), mientras que enfatiza cambios en los grupos de ingresos medios de la distribución.
- El coeficiente de Gini no proporciona ninguna información sobre el nivel absoluto de ingresos de la población. Así pues, un país con niveles de ingresos absolutos muy bajos puede tener una distribución de ingresos igual y seguir teniendo una población extremadamente pobre.